La vieja conocida, Montserrat, es un lugar lleno de agradables sorpresas, no es que la Teresina sea una nueva sorpresa, pero Montserrat siempre guarda algo nuevo, un amanecer, una luz, una niebla, una bauma, una canal, una via, una pared, un compañero, siempre te da algo.
En principio la via la iba a hacer en solitario, pero pronto, siendo domingo aún más, encontre con quien compartir la experiencia de una via tan popular.